GRACIAS... y punto

   Ante todo, quiero daros las gracias a todas las que habéis pasado por aquí y habéis dejado vuestros comentarios. Cuando empecé con este blog no lo hice por un afán de protagonismo y no me planteaba cuestiones como recibir comentarios, visitas o tener más o menos seguidores; de hecho, los gadgets de visitas y de seguidores los puse porque a mi hija le hacen ilusión. Sólo deseaba mostrar las cosas que hago, al igual que me deleito viendo los trabajos de todas vosotras, y aportar mi humilde contribución a todo este mundo de labores que nos entusiasman, nos relajan,o simplemente nos hacen sentirnos bien.

   Sin embargo, he de admitir que sienta bien ver que el número de visitas aumenta, que alguien se para a ocupar un poco de su tiempo en dejar un comentario y que hay más personas que te acompañan en este camino. Yo soy la primera que la mitad de las veces no tengo tiempo de visitaros, o de dejaros algún comentario, pero se hace lo que se puede, y en muchas ocasiones tenemos que elegir entre visitar los blogs o coser.

   De todas formas, seguiré visitando vuestros blogs  y enlazándoos en la medida en que os vaya conociendo, y de nuevo he de deciros

GRACIAS :))))))))))

  Y ahora os dejo unas fotos de lo último que he hecho en punto.

   El año pasado descubrí un chal llamado Saroyan y me enamoré de él; no pude hacerlo y este año me decidí. Sé que con estas temperaturas lo voy a disfrutar poco pero el invierno que viene ya puedo empezar con él desde el primer día que comience el frío (no hay mal que por bien no venga). Así que aquí lo tenéis a pesar de la mala calidad de las fotos

  Aquí cogí una modelo pero de muy mala gana porque a ella no le gusta este chal, pero bueno, no se lo voy a a poner al hermano o al padre...

   Me ha salido un poco grande, pero así abriga más.  Si alguna lo quiere hacer, tomé el tutorial de aquí, en el blog de MJ, que lo ha traducido al español.

   Bueno..., y esto no es lo último, pero sí lo penúltimo. Un cuello con el diseño Moebius, el ocho infinito, con adornos de ochos, totalmente reversible y sin costura. Se lo hice a Rocío, mi alergóloga, que como suele ir en moto, se me ocurrió agradecerle sus desvelos y simpatía con algo que la abrigara. Se lo entregué el mes pasado y ayer, cuando volví a ponerme ni vacuna me dijo que presumía mucho de él, que lo usa como diadema, como cuello y hasta como manguito, sólo hay que tener imaginación...

   Siento mucho que no se vea bien el color, un marrón oscuro, casi chocolate, muy bonito, que pensé que le iría muy bien con los tonos que ella suele usar; pero es que no sé como hacer las fotos a las cosas de punto, porque no salen bien ni con flash ni sin él, pero al menos espero que os hagáis una idea

   Si alguien quiere hacerlo, lo saqué de Tejemanejes.  Es muy gratificante hacerlo.

  Por hoy creo que ya os he soltado bastante rollo. Hasta otro ratito.